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Por Christina Grenga

Tal vez usted quiere perder peso y sus antojos de azúcar están saboteando sus esfuerzos. O quizás usted quiere más energía y sabe que deshacerse del azúcar en su sangre es la clave. Puede ser que ya esté cansado de los cambios de humor causados por el consumo de azúcar.

Al acabar con el hábito del azúcar, su salud mejorará dramáticamente, pero puede parecer una de las cosas más difíciles que usted ha hecho. Esto no es una sorpresa, dado a que el azúcar es tan comúnmente disponible, provocando tentación en muchas de los alimentos que nosotros comemos. La buena noticia es, que hay muchas formas para reducir el azúcar de nuestra dieta sin sentirse privado. Entender las razones detrás de sus antojos es la mitad de la batalla para encontrar la solución que funcione para usted.

Es importante resaltar que el azúcar es una sustancia sumamente adictiva; así como la cafeína y el alcohol. El azúcar es una sustancia adictiva porque comer la mínima cantidad genera el deseo de comer más, y acabar su consumo repentinamente puede causar síntomas como: dolores de cabeza, cambios de humor, antojos y fatiga.  

Sabiendo esto, no se culpe por ser “débil” y renunciar si se cae del vagón. No se trata sólo de la fuerza de voluntad; sus antojos tienen un efecto psicológico. Sin embargo, es posible acabar con el azúcar, reduciendo gradualmente su ingesta y sin ningún tipo de dolor.    

Tenga una intención clara y un objetivo Tener una intención clara y un objetivo en mente le ayudará a salir del vagón del azúcar, y mantenerse afuera. Visualice ¿cómo va a ser su vida cuando ya no esté bajo el control de su dependencia al azúcar?, ¿Es su meta perder peso, tener más energía, mejor concentración y menos cambios de humor?, ¿Qué le permitirán estos beneficios hacer? Pregunte el gran “por qué”, hasta que descubra lo que realmente lo mueve.        

También tome nota de sus obstáculos. Escriba un diario sobre sus desafíos, e identifique lo que realmente lo está deteniendo. Llegue hasta el fondo de esto. Este es el momento de dejar de esconderse detrás de sus excusas y tomar acción para vivir su vida al máximo.    

Use a Dios como su fuerza motriz para tener la fortaleza de cumplir su meta de ser más sano. Intente encontrar un lugar tranquilo donde usted pueda compartir esos pensamientos con Dios, así sea solo un par de minutos al día.

Cultivar conciencia por medio de un registro  El primer paso para generar cambios, es ser consciente del problema. Cultivar consciencia y mantener un registro de comida para observar cómo se siente después de consumir ciertos alimentos – registre cómo reacciona su sistema digestivo, cómo cambian sus niveles de energía en las próximas horas, también cómo su concentración y humor están siendo afectados-.   

Por 2 a 3 días, sintonice el impacto del azúcar en su bienestar general, incluyendo su bienestar físico, su claridad mental y balance emocional. Identifique qué pasa cuando consume mucho azúcar – ¿Se siente fuerte y después choca rápidamente? ¿Se pone malhumorado o gruñón? ¿Siente más deseo de comer azúcar aun cuando sabe que no debería consumirla y después se siente culpable?    

Esta mentalidad le ayudará a crear la conciencia que usted necesita para lograr cambios. Esta es la oportunidad para que usted maneje lo que come y toma, para que usted pueda controlar lo que piensa y siente.

Conozca al enemigo Los humanos aman las cosas dulces- es parte de nuestra naturaleza. Incluso, mucho antes de que la raza humana comenzara a refinar azúcar, nuestros ancestros buscaban comida con gustos dulces. Nuestro cuerpo está programado para desear sabores dulces, porque el azúcar y los carbohidratos proveen energía que necesita nuestro cuerpo para nuestras actividades del día a día. Las comidas dulces contienen una alta concentración de azúcar; lo que significa una gran cantidad de energía fácilmente accesible que hace atractivo el azúcar.

Es importante recordar que Dios no le permitirá ser tentado más allá de su habilidad y él también proveerá una manera de escapar para que usted pueda soportarlo (Corintios 1: 10:13).

Frene los antojos de azúcar con alimentos Armado con este conocimiento, usted puede reducir sus deseos de azúcar, por medio de comidas como: granos, pescado, vegetales marinos, frijoles, raíces y hortalizas dulces, nueces, semillas, vegetales verdes y calabazas de invierno. Estos alimentos ayudan a crear equilibrio, satisfaciendo las necesidades del cuerpo sin depender de alimentos llenos de azúcar para satisfacer sus necesidades de energía.

Ellos también son muy naturales. Inclúyalos en sus comidas, y observe si ayudan a reducir su urgencia de comer postres. También sea cauteloso sobre tener una ingesta baja en proteínas, ya que esto puede enmascararse como un antojo de azúcar. Si usted tiene relativamente una dieta de baja proteína y tiende a sentir fatiga fácilmente, trate de incrementar el consumo de esta, o experimente con el tipo de proteína en su dieta. Además de carne y pescado, usted puede probar nueces y semillas, queso de buena calidad en una cantidad moderada, como también huevos y frijoles.

Los antojos de azúcar también pueden ser la forma en que nuestro cuerpo está pidiendo ciertos nutrientes, además de proteína.  Estos nutrientes incluyen el cromo, el carbono, el fósforo, el azufre y el aminoácido triptófano.

Usted también puede usar hierbas y especias para mitigar sus antojos de azúcar. El cilantro, la nuez moscada, el clavo y cardamomo endulzan sus alimentos naturalmente. La Canela ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre, y también saca el sabor dulce en nuestros alimentos. Úselos para curar sus antojos de azúcar, satisfaciendo su necesidad de un sabor dulce.

Mantenga la Energía NaturalmentePuesto que la necesidad de obtener energía rápida es la mayor razón por la que las personas buscan el azúcar, es importante hacer cambios en su estilo de vida con el objeto de aumentar su energía, para que esto no pase.   

El estrés puede ser una gran razón para la adicción al azúcar. Las hormonas del estrés exacerban los antojos de azúcar porque los azúcares y dulces estimulan nuestros cerebros a crear químicos para sentirnos bien. Si usted se encuentra bajo una situación de estrés y está en busca de dulces, literalmente tome un paso atrás del frasco de galletas, respire profundo, tome un poco de oxígeno para su cerebro y póngase en contacto con la razón de sus antojos.      

Este puede ser un gran momento para tener una conversación con Dios para confirmar su necesidad de auto control, el cual él nos dio a todos nosotros.

Prevenga la deshidratación–  A menudo, cuando anhelamos el azúcar, es nuestro cuerpo sediento, no hambriento. Muchas personas están crónicamente deshidratadas o bajo-hidratadas.  Los síntomas de deshidratación incluyen migrañas, dolores de cabeza, cansancio y problemas digestivos.  

En particular, cuando usted se siente cansado o tiene un dolor de cabeza debido a deshidratación, usted va a querer un alivio rápido y seguramente significa que buscará comidas azucaradas. La próxima vez que siente la urgencia de consumir azúcar, pruebe tomando un vaso con agua, después dese a usted mismo unos minutos y mire qué pasa.    

Siga la Regla de 90/10 Finalmente, siga la regla de 90/10. Coma sanamente en un 90% del tiempo, y mímese sin culpa un 10% del tiempo. No se castigue así mismo si se llega a caer -esta clase de culpa-  le va a impedir seguir su camino.

Como se dice en los Gálatas (5:22-23), “El fruto del espíritu es el amor, la alegría, la paz, la paciencia, la bondad, la fidelidad, la gentileza y el autocontrol”. Dios ha diseñado nuestro espíritu para cumplir estas metas. Por lo tanto, la privación no es una manera sostenible de hacer cambios que duren; es la fe la que puede curar su cuerpo y su espíritu. Usted podría estar dispuesto a abstenerse de comer su plato favorito por dos semanas, pero ¿qué pasará después? La mayoría de la gente probablemente come de gula, se van a sentir mal y se rendirán.

Permítase a usted mismo comer lo que ama, y posiblemente encontrar sustitutos más sanos para sus caprichos, es como usted puede hacer cambios sanos que le traerán beneficios en el futuro.

Christina Grenga es una entrenadora de salud holística certificada basada en la fé; quien trabaja con mujeres cristianas modernas que están listas para dejar de hacer dieta definitivamente, perder peso de forma natural, y transformar sus vidas. Ella se graduó del mundialmente reconocido Instituto para la Nutrición Integrativa en la ciudad de Nueva York, y utiliza un enfoque centrado en Cristo para guiar a las mujeres en la creación de una vida equilibrada. Puede aprender más sobre Christina en  www.grengahealth.com.

 

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